En 1925 ante la probable venta del terreno donde estaba la sexta cancha, la comisión se dedicó a la búsqueda de un nuevo terreno para construir un nuevo estadio. Este estadio sufrió un fuerte incendio la madrugada del 4 de agosto de 1923 que destruyó completamente sus instalaciones de madera, las cuales en pocos meses fueron reconstruidas. Tras enterarse de que jugaban en la calle, decidió gestionar la cesión de un predio para construir una donde pudieran disputar sus partidos.